La
selección nacional de taekwondo de los Estados Unidos va a
enfrentarse a Korea. Pese a que son buenos deportistas, a priori
nada tienen que hacer contra los cinco koreanos que son considerados
como los mejores del mundo. Además, deberán sobreponerse a sus
diferencias individuales y problemas personales para lograr formar un
verdadero equipo ...
Salvar
una vida con una derrota es ganar victoria de honor en el interior.
Una
de las películas favoritas de artes marciales de mi infancia. Y es
que, a pesar de ser una golosina para degustadores del subgénero, se
aleja de los tan manidos estereotipos que solían caracterizar a este
tipo de producciones que copaban las estanterías de los videoclubs.
En
Campeón de campeones no existe el típico héroe protagonista que
reparte cascoporros a mansalva (pese a que algunos personajes tengan
más peso que otros: en este caso Tommy Lee y Alex Grady) , en su
lugar, son cinco luchadores que pese a su peculiar forma de ser y de
pelear deberán olvidar sus diferencias para poder actuar como un
equipo. Así, Virgil (John Dye) es muy pacífico y practica budismo,
Sonny Graso (David Agresta) es todo un conquistador y Travis Brickley
(Chris Penn) es un pendenciero. Pero los dos personajes que tienen
más peso en la película son Alex Grady (el mítico Eric Roberts),
un desconsolado viudo que cuida solo de su hijo pequeño y que lidia
con una terrible lesión sufrida años atrás; y Tommy Lee (Phillip
Rhee, quien ideó la historia y produjo la película), un fuera de
serie traumatizado al tener que enfrentarse al despiadado Dae Han
Park ( Simon Rhee), el luchador que mató en combate a su hermano. El
equipo lo completan Frank Couzo (James Earl Jones), un férreo
entrenador que terminará por mostrar su lado más tierno, y
Catherine Wade (Sally Kirkland), quien les aportará paz y fortaleza
mental. En cuanto al equipo coreano, destacan los actores Simon Rhee
y James Lew, ambos espectaculares actores marciales y especialistas
con una experiencia profesional que quita el hipo. Curiosamente,
siendo Simon Rhee el hermano de Phillip Rhee, es su personaje el que
mata en combate al hermano ficticio de Tommy Lee y quien se
enfrentará a él en épico combate (hermanos en la realidad y
enemigos en la ficción).
En
realidad, en Campeón de campeones las escenas de acción son mínimas
(la mayoría son las ecenas de los combates finales) y todo el
metraje previo es una excusa para profundizar en las relaciones entre
las distintas personalidades de los protagonistas y su evolución
hasta llegar a formar un verdadero equipo. Las peleas más
importantes son internas. Además, nos habla de temas tan
importantes como la amistad, el honor, el sacrificio y el perdón por
encima de la venganza personal. El momento más emotivo y recordado
sucede cuando Tommy, tras perdonarle la vida y a costa de perder el
campeonato, recibe la medalla a manos de un Dae Han Park (recordemos
que este había matado a su hermano) visiblemente emocionado y que
pronuncia una de las frases más maravillosas que podemos encontrar
en una película de artes marciales: "salvar una vida con una
derrota es ganar victoria de honor en el interior". Os juro que
aún se me pone un nudo en la garganta con esta escena.
Lo
dicho, una de mi películas de artes marciales preferidas.
GERMÁN
FERNÁNDEZ JAMBRINA
TRAILER
Qué peliculón. Recuerdo cuando le ponen el hombro en el sitio a Eric Roberts, gallina de piel y geniales las hostias en los combates finales sobre todo entre los hermanos Rhee.
ResponderEliminarA parte se me quedó la musiquilla grabada en el cerebro. Después me parece que hicieron dos o tres más pero no he visto ni una XD. Qué "rimembers". Un saludo ochentero!!
Gracias, Edu. La segunda parte no está mal, échale un vistazo. La tercera no la he visto.
ResponderEliminarUn saludo!