Icono
ochentero donde los haya. Esta película, en su momento no alcanzó
el éxito que se le presuponía. Entre un gran elenco de actores y
con el reclamo de la banda sonora a cargo de los idolatrados Queen,
se estrenó en 1980. En cuanto a cifras y a críticas fracasó
estrepitosamente. Pero algo tiene esta película, que a día de hoy
es una de las películas más admiradas por los amantes de la
cienci-ficción y los amantes del cine de los 80.
Hay
que reconocer que tanto el guión, actuaciones, y los efectos
especiales dejan bastante que desear, pero hay algo más (a parte de
la genial banda sonora) que la eleva a ser una película con más
fans de la historia del cine. Puede ser la estética visual, el
vestuario y que ya venía de un comic que arrastraba muchos
seguidores. El caso es que Flash Gordon sigue dando que hablar entre
los ochenteros, si no, para muestra la película Ted, en la que el
protagonista encarnado por Mark Wharlberg nos muestra su obsesión
por la película y por su protagonista Sam J. Jones.
Para
mí es uno de los mejores y más gratos recuerdos que tengo de mi
infancia en los 80 cinematográficamente hablando, además que ahí
empecé a conocer a uno de mis grupos favoritos de la historia del
rock (Queen).
Quisiera
mostraros todo lo que lleva tras de sí esta mítica cinta, desde sus
orígenes en el comic hasta sus adaptaciones para la televisión y a
la animación.
Nos
remontamos hasta el 7 de enero de 1934, cuando se lanzó el comic de
Alex Raymond, primero se hizo como página dominical para el King
Features Syndicate, posteriormente fue retomada por otros dibujantes
y guionistas.
El
comic es bastante surrealista, y todo parte de Flash Gordon,
un jugador de fútbol americano famoso (de los New York Jets) que
acaba con su chica en el planeta Mongo tras un giro de guión
inexplicable.
Pasaron
los años y el personaje de Flash Gordon pasó de ser un personaje
humano a un super-héroe.
Más
tarde DC Comics retomó los comic books del personaje. En el 36, 38 y
40 aparecieron series para la televisión.
En
1979 surgió una serie animada basada en los comics, y ya en 1980 se
realiza la película de la cual hemos hablado al principio. También
un telefilm (1982) y dos series animadas (1986 y 1996). Además, el
director Stephen Sommers cuenta actualmente con los derechos de cine
del personaje.
Sobre
nuestra película ochentera, comentaros que fue dirigida por Mike
Hodges, producida por Dino de Laurentis, guión de Lorenzo Semple Jr.
Protagonistas:
Sam
J. Jones Flash Gordon.
Melody
Anderson Dale Arden.
Chaim
Topol Dr. Hans Zarkov.
Timothy
Dalton Príncipe Barin.
Max
von Sydow Emperador Ming.
Ornella
Muti Princesa Aura.
La
realidad es que la película, de mala y divertida que es, acaba
siendo hasta buena y entrañable.
La
curiosidad es que años antes, un joven George Lucas preguntó al
productor italiano Dino De Laurentiis por los derechos para hacer la
película basada en la obra de Raymond, pero se negó a dársela a
él. Poco después Lucas se embarcó en un proyecto llamado Star
Wars, mira tú por donde.
Una
vez en marcha el proyecto, la producción se disparó. Como ejemplo
para entenderlo: ese año se estrena El Imperio Contraataca con un
presupuesto de 18 millones de dólares de la época, mientras que
Flash
Gordon
casi lo dobla con 35 millones de dólares. La taquilla se encargó
de despejar las dudas, el film recaudó tan solo 27 millones de
dólares.
Tras
esta estrepitosa caída se fulminó la idea de hacer una segunda
parte, y eso que la primera acaba con un final abierto a ello.
Aún
así, la película llegó a tener varias nominaciones a los premios
Bafta. Y Sam J. Jones también fue nominado en los premios Razzi
como peor actor.
Siempre
se ha considerado que uno de los mayores errores de esta película
fue el trasladar fielmente la estética kitsch
y pulp
del comic, que la hizo bastante extravagante para la mayoría del
público.
Y
los efectos visuales, aunque en aquella época no estaban mal, pero
al compararlo con las cintas de Star Wars fue otro de los puntos que
la hizo fracasar.
El
caso es que el fenómeno Flash Gordon se inició allá por 1934 y
perdura hasta la actualidad. Así que algo tendrá que la ha hecho
perdurar tanto en el tiempo. Mi valoración personal es que hay que
ver la película de 1980, y si me apuras, yo recomiendo que echéis
un vistazo a los comics y así os hará entender más aún la
película. A mí me encanta, es más, es de las películas que yo
creo que todo ochenter que se precie debería de ver, ya que tiene
todo. Un vestuario muy llamativo y colorido, una historia fantástica
que engancha desde el principio. La estética de los efectos visuales
y decorados, y sobre todo, sobre todo, esa pedazo de banda sonora a
cargo de Queen que no hay que perderse. Ya sé que esta película o
se adora y ama o se odia, pero, de verdad, no os dejará indiferentes
y ya me contaréis si os ha parecido una castaña como a muchos, o
una obra maestra de culto como a mí y a miles y miles de fans.
BENJAMÍN CARRETERO MONTES
No hay comentarios:
Publicar un comentario