Queridos amigos, estimados
Ochenters, vuelvo a vosotros después de un tiempo ausente, y tengo que
reconocer que os he echado mucho de menos. Y, tal y como empecé en mi primer
escrito con el texto sobre un payaso que nos invitaba a flotar, vuelvo con otra
adaptación al cine de otra novela del maestro del misterio y del terror, Stephen King y su novela “Cementerio
de Animales” titulada en España para el cine como “Cementerio Viviente”.
Como podréis suponer, a
partir de aquí hablaremos largo y tendido sobre la trama, por lo que si aún no
la habéis visto, os aviso de spoilers y destripes de la cinta.
Dicho esto, sigamos.
Bien, la historia
comienza con la familia formada por Louis,
interpretado por Dale Midkiff (“Airbud”,
“El
Hada de los Dientes”…) y Raquel
Creed a la que da vida Denise Crosby
(“Deep
Impact”, “48 Horas”…)
También conocemos a la
hija mayor Ellie, de ocho años, e
interpretada por las gemelas Blaze
Berdahl y Beau Berdahl y el
pequeño Gage de dos años, cuyo papel
cayó en las manos del jovencísimo Miko
Hughes.
Vemos como la familia al
completo se muda a su nueva casa en Ludlow,
Maine (Sí, volvemos a Maine). Junto a ellos viaja Churchill, el gato de la familia al que
cariñosamente llaman “Church”.
El motivo de la mudanza
no es otro que por trabajo, pues Louis
ha sido destinado a Ludlow para
ejercer como el nuevo médico de la escuela/universidad. Mientras la pareja se
hace arrumacos junto a la casa, ilusionados por empezar una nueva vida, Ellie, decide ir a jugar con un antiguo
columpio formado por una desgastada soga y un viejo neumático que cuelga sobre
una rama. La pequeña Ellie advierte
de un sendero, un misterioso camino delimitado por piedras junto a la casa e
informa a los padres de ello con tan mala suerte que en ese mismo instante la
soga se rompe y la pequeña cae al suelo entre lágrimas.
Louis y Raquel corren en
su ayuda, dejando al pequeño Gage sin
vigilar (y todos los que somos padres nos encogemos de desesperanza en este momento)
que, sin temor alguno, se dirige raudo hacia la carretera, la cual está
transitada por un incesante tráfico de camiones que cruzan frente a la casa.
Mientras consuelan a la pequeña y sus rodillas raspadas, Louis advierte que el pequeño está a punto de cruzar la carretera a
la vez que se acerca una furgoneta de grandes dimensiones. Desesperados, los
padres corren para evitar que Gage atraviese
la carretera y sea atropellado y, justo cuando el niño pone un pie en ella, con
el fatídico desenlace prácticamente inminente, es rescatado por Judson, interpretado por Fred Gwynne (Al que todos recordaréis
por ser Herman Monster en “La
Familia Monster”)
Jud
es un entrañable anciano y ahora vecino de la familia, que vive en la casa
anexa y con el que Louis hace migas inmediatamente.
Ya todos asentados en
casa y con los niños dormidos, Louis
decide dar un paseo nocturno por los alrededores de la casa y a pesar de estar
entrada la noche, los camiones no cesan de atravesar la peligrosa carretera
junto a la casa. Mientras tanto, Judson
está tomando una cerveza en el porche de su casa e invita a Louis a acompañarlo mientras los
camiones siguen circulando por la carretera, la cual según Jud, son los responsables de la muerte de la mayoría de mascotas del
pueblo y que el pequeño sendero anexo a la casa, conduce al cementerio de
animales, recomendándole castrar a Church,
el gato, para evitar que salga de la casa y sea atropellado.
Al día siguiente y aún
con la mudanza en ciernes, conocemos a Missy
(interpretada por Susan Blommaert)
un extraño personaje que sufre de problemas de estómago y continuos ataques
derivados de sus problemas de salud, la cual se encarga de la casa.
Ese mismo día, Jud lleva a la familia de excursión
atravesando el sendero, que se dirige al bosque y que lleva al cementerio de
mascotas. Cuando llegan, un cartel indicativo mal escrito con la palabra “Pet Sematary" preside la entrada.
Cementerio donde los
niños de la ciudad entierran a sus animales cuando mueren, en su mayoría perros
y gatos que han sido atropellados por los camiones de la carretera.
Allí Judson explica a Ellie
qué es un cementerio, cosa que Raquel
no aprueba, pues considera que los niños no deberían saber qué es la muerte.
Esa misma noche, la pequeña llora
desconsolada, pues no quiere que Church
termine allí.
Con la llegada del nuevo
día, Louis decide llevar a castrar a Church para evitar que sea atropellado
en sus salidas nocturnas. Ya en la escuela, Louis
recibe a un estudiante, el cual ha sido atropellado por un camión y está malherido.
Éste es Victor Pascow (interpretado
por Brad Greenquist), el cual dirige
sus últimas y amenazadoras palabras a Louis,
a pesar de que nunca se han conocido, advirtiéndole que no debe cruzar el
umbral más allá del cementerio de mascotas.
Esa misma noche, con la
muerte del joven Victor reciente, el
espíritu de éste visita a Louis en su
habitación, invitándolo a que lo acompañe. Louis
lo hace y Victor lo lleva al
cementerio de animales, pues según sus propias palabras, quiere ayudarle ya que
Louis trató de ayudarlo a él.
Tras cruzar el umbral del
cementerio, Victor le advierte que no
debe ir al lugar donde los muertos andan, más allá de un cerco de árboles. Tras
la tenebrosa pesadilla, Louis
despierta en su cama, creyendo que todo ha sido una pesadilla, pero cuando se
da cuenta, tiene los pies llenos de hierba y barro.
Pasan los días, se acerca
acción de gracias y la familia se despide de Louis, pues van a casa de los padres de Raquel, donde él no es bien recibido. Tras la marcha de la familia,
Louis recibe la llamada de Judson, el cual le informa que tiene una
mala noticia que darle, ya que hay un gato muerto en su jardín el cual cree que
puede ser el cadáver de Church.
Confirmada la muerte, Judson comenta
que puede haber una opción más allá de enterrar el cuerpo.
Ambos se dirigen al
cementerio y Judson comenta que no lo
enterrarán en el mismo cementerio, si no más allá, en un claro, colina arriba.
Tras un largo viaje, llegan a un antiguo cementerio, el cementerio de los
indios Micmacs, (sí, nuevamente maldiciones de indios en una historia de Stephen King)
una tribu nativa americana.
Extrañado, Louis pregunta
que porqué ahí, sin más explicaciones y siguiendo las instrucciones de Jud, Louis
cava en la tierra pedregosa y entierra el cadáver de Church. De vuelta a la casa, Judson
le explica que no puede revelar nada de lo ocurrido, que debe ser el secreto de
ambos y se despide.
Al día siguiente,
mientras recoge la hojarasca del jardín, comprueba asombrado que la mascota de
la familia ha vuelto a casa y mientras comprueba que está bien, que sólo
desprende un olor muy desagradable, recibe un zarpazo en la cara y éste huye.
Louis
decide ir a casa de Jud a comentarle
lo ocurrido, el cual le cuenta que conocía la existencia del cementerio de los Micmacs a través de un vagabundo, ya que
al igual que Ellie, él había perdido
a su perro Spot siendo un niño, por una infección al quedar enganchado a un
alambre de espino y que ese vagabundo fue el que le recomendó enterrar a su
perro en aquel mismo cementerio indio. Al día siguiente, Spot volvió a casa, pero era un perro totalmente distinto, agresivo
y aún con las marcas por el alambre de espino que le causó la muerte.
Ese mismo día tuvieron
que sacrificar a Spot, y fue
enterrado por fin en el cementerio de animales. Tras la historia del pobre
perro, Jud comenta que consideró el
cementerio de los Micmacs pues no
creía que Ellie estuviera lista para
que su mascota, Church, falleciera. Louis pregunta si alguna vez habían
enterrado a algún humano allí, a lo que Jud,
muy alterado, contesta que no.
Más tarde, con Louis ya en casa y mientras toma un
baño, Church arroja una rata muerta a
la bañera, tras el sobresalto y observando el extraño brillo de los ojos de Church, echa al gato del lugar.
Al día siguiente, Louis recibe a la familia en el
aeropuerto que regresa de su viaje de casa de los padres de Raquel. Ellie se acerca corriendo a preguntar si Church está bien, ya que ha tenido un sueño muy extraño donde moría
atropellado y él y Jud, lo enterraban
en el cementerio de mascotas, Louis,
intentando quitar hierro al asunto, responde que sólo fue una pesadilla y que Church está bien en casa.
De vuelta en casa, Ellie advierte del mal olor de Church, mientras tanto, vemos a Missy en su casa, la cual ya no soporta
el dolor y, escribiendo una nota de suicidio, se despide sabiendo que tiene
cáncer, tras esto baja al sótano y se ahorca con la nota adherida al pecho.
En el funeral, el
sacerdote, (cameo de Stephen King)
aparece oficiando la despedida a Missy.
Una vez finalizado el entierro,
Jud pregunta a Louis por Raquel, ya que
no ha asistido al entierro, el cual afirma que está enferma, a lo que Ellie interrumpe diciendo que estaba en
cama vomitando desde que se enteró que Missy
se había suicidado. La pequeña se marcha al coche y Jud pregunta a Louis por
su gato, el cual responde que éste no es suyo sino de Ellie pero Jud lo corrige
diciendo que no, que Church ahora es
suyo, y tras esto se marcha.
Esa misma noche, Ellie pregunta a su padre por Missy, si cree que ésta irá al cielo mientras
Raquel, desde la cocina, los está
oyendo entre lágrimas, debido a que su hermana Zelda (interpretado por Andrew
Hubatsek, sí, la espeluznate hermana de Raquel,
que a todos nos causó pesadillas, era
un actor maquillado) murió de meningitis.
Raquel
narra su trauma a la muerte con la aterradora historia de su hermana Zelda; cuando ella tenía ocho años. Zelda estaba recluida en su dormitorio
debido a su enfermedad, la cual era considerada un secreto vergonzoso para la
familia debido a su monstruosa apariencia, producto de la meningitis.
Todos deseaban que muriese
pero no para que Zelda no sufriese,
si no para no hacer sufrir a la familia. Una noche, estando Raquel a cargo de Zelda a solas en casa, murió entre convulsiones a lo que la pequeña
no hizo nada por ayudarla y aún hoy día no sabe si aquella noche lloraba por la
muerte o reía con alivio por no tener que hacerse cargo de Zelda nunca más. Louis
responde que nunca debió quedarse sola con una persona en esa condición, pues
sólo tenía ocho años.
Al día siguiente, vemos a
la familia pasando un día de campo junto a su vecino Jud.
Louis está
volando una cometa e invita al pequeño Gage
a acompañarlo, el cual la coge pero se le escapa.
Ellie
pide volar la cometa, Louis se gira
(dando la espalda a Gage otra vez…) y
le dice que tras Gage, lo hará ella. Gage se aleja persiguiendo la cometa que
es llevada por el aire hasta la carretera al mismo tiempo, un camión viene a
toda velocidad. Jud muy alterado
advierte que Gage se dirige a la
carretera y grita a Louis, que se vuelve
buscando al pequeño, el cual ya está junto a la carretera. Haciendo un intento
desesperado por llegar hasta su hijo, tropieza justo al lado de Gage.
El camión no consigue
frenar debido al exceso de velocidad, por lo que atropella al pequeño, que
muere en el acto.
Ya de noche, en compañía
de Jud y aún con la camiseta cubierta
de sangre del pequeño, Louis,
totalmente consternado, está mirando fotos de Gage. Ellie entra en
escena y trae consigo una foto junto a su hermano, que guardará hasta que Dios
les quiera devolver al pequeño Gage,
recibiendo una respuesta de Jud, pues
Louis está totalmente ausente, el
cual le dice que Dios no está para eso, ante esa negativa, Ellie rompe a llorar. Jud
se despide rogando a Louis que cuide
de su pequeña, pues ahora lo necesita.
Al día siguiente, ya en
el entierro de Gage, el padre de Raquel, Irwin Goldman, interpretado por Michael Lombard (“Cocodrilo Dundee”, “El
Honor de los Prizzi”…) que nunca aprobó la relación con su hija, culpa
a Louis del fatal desenlace con su
nieto junto al ataúd del pequeño.
Tras esto, comienza a
golpearlo totalmente enfurecido y Louis,
en un acto de defensa propia, empuja a Irwin
que termina cayendo sobre el ataúd del pequeño que queda entreabierto. Después
del fatídico funeral, regresan a casa y acuestan a Ellie, la cual pregunta a su padre que si Dios realmente quisiera,
le devolverían a Gage, a lo que el
padre responde afirmativamente.
De vuelta en su
habitación y tras otro desagradable encuentro con Church, Louis baja a la
cocina, viendo a Jud que acaba de
entrar para ver cómo se encuentra la familia.
Allí Jud comenta que sabe qué está pensando, y que es una locura.
Confiesa que le mintió cuando le dijo que no habían enterrado nunca a nadie en
el cementerio de los indios Micmacs,
pues sí enterraron a un joven soldado que murió al final de la Segunda Guerra
Mundial, justo antes de un permiso de vuelta a casa. Su nombre era Timmy Baterman, y fue enterrado en el
cementerio indio por su padre, Bill
Baterman sin saber lo que realmente le ocurriría, pero al igual que Church, no volvió siendo Timmy, si no otra cosa, un ser maldito
que aterrorizaba a la gente del pueblo.
Los hombres del pueblo
decidieron poner fin a la “vida” de Timmy,
y fueron a la casa de los Baterman y
prendieron fuego a la casa, lo que costó la vida de Timmy y su padre, Bill
Baterman. Reitera que la tierra del cementerio está yerma porque está
maldita y que los mismos indios Micmacs
dejaron de enterrar a sus seres queridos en esa tierra infernal al ver en qué
se convertían.
Louis
confiesa que está en lo cierto, que ha pensado en enterrar a Gage allí a lo que Jud responde que a veces es mejor estar muerto, y que se considera
culpable de la muerte del niño por haberle descubierto aquel sitio maldito.
Al día siguiente, Raquel y Ellie se marchan nuevamente a Chicago,
con los padres de Raquel para
intentar mejorar las cosas con Louis.
Mientras Ellie confiesa a sus abuelos
que no quiere volver a Chicago, que
ha tenido una pesadilla con su padre, Gage
y un hombre llamado “Pascow” (nombre
del estudiante atropellado al principio de la cinta y que advirtió a Louis de los peligros del cementerio más
allá del cementerio de mascotas) Irwin
se disculpa por su actuación en el entierro e intenta hacer las paces con Louis.
Tras un frío estrechamiento de manos, se marcha. Ellie le
ruega que vaya con ellos a Chicago
porque tiene miedo, a lo que Louis le
responde que irá en pocos días.
Louis
regresa
a casa y haciendo caso omiso a las palabras de Jud, marcha al cementerio para desenterrar el cadáver de Gage. Sentado junto a la tumba del
pequeño y negando lo injusto de la muerte del niño, Victor Pascow aparece junto
a otra tumba, recordándole que no debe atravesar esa barrera, pues la tierra es
cruel.
Louis rompe a llorar, aun
así, sigue adelante, pasará un par de días con Gage y si no sale bien, lo
dormirá para siempre con una inyección y así su familia no tiene por qué sufrir
más.
Esa misma noche, vemos a Ellie ya en Chicago, llorando en su cama, Raquel
intenta consolarla diciéndole que sólo ha tenido una pesadilla pero Ellie lo niega, pues dice que ha vuelto
a recibir la visita de Pascow, al que
ella llama un espíritu bueno que viene para advertirlas, el cual le ha dicho
que su padre quiere hacer una cosa terrible. Un poco más calmada, Raquel promete a Ellie que llamará a su padre para comprobar que todo está bien.
Nadie responde a llamada de Raquel en
casa, pues Louis está en el
cementerio, exhumando el cadáver de Gage.
Tras esto, decide llamar a Jud para
ver si Louis está con él, pero éste
responde que no.
Raquel
entonces le dice que volverá a casa (y atentos a este cuadro tras Raquel pues hablaremos
de él después), y Jud, temiendo saber
dónde está Louis, responde de manera
imperativa, diciéndole a Raquel que
no debe volver. Raquel haciendo caso
omiso a las palabras de Jud, se
despide y cuelga el teléfono.
Nuevamente en el
cementerio, Louis consigue
desenterrar a Gage entre lágrimas y,
abrazando el cadáver del niño, le dice que todo saldrá bien.
Raquel
mientras tanto y acompañada por el espíritu de Pascow que parece guiarla, se dirige a Boston para coger un vuelo con conexión a Maine. Aun así no consigue coger el vuelo, por lo que termina
alquilando un coche.
Louis,
cargando con el cuerpo de su hijo, se dirige decidido a través del sendero
hacia el cementerio indio para enterrar el cuerpo.
Mientras Raquel va de camino a casa en el coche
alquilado, pincha un neumático sufriendo un accidente que la saca de la
carretera. Finalmente, Louis consigue
enterrar a Gage. Tras esto regresa a
casa y queda profundamente dormido, totalmente extasiado y esperando a la
mañana siguiente para ver qué ocurre.
Y, como siempre, aquí os
dejo la historia, pues si consigo haceros “enfadar” pensando en cómo termina la
familia Creed y el pequeño Gage, es que he relatado correctamente
la trama de la cinta. Para los que aún no la hayáis visto, os recomiendo que la
veáis, a pesar de la crudeza de la cinta y si ya la habéis visto, una revisión
de la película no os vendrá mal.
Rodada con un presupuesto
de once millones y medio de dólares, consiguió una buena recaudación en
taquilla, llegando a superar la suma de setenta y cuatro millones.
Dirigida por Mary Lambert (que previamente había
dirigido varios videoclips de Madonna,
como “Like a Virgin”, “Material Girl” o “La
Isla Bonita”, y que también terminó dirigiendo la secuela)
La adaptación en guion de
la novela fue escrita por el propio King,
pues como ya sabéis, no quedó contento en absoluto con la libre adaptación de “El
Resplandor” de Kubrick considerándola
un fracaso llegando a hacer su propia versión de telefilm.
Jack Torrance versión King
Por esto, una de las
normas que impuso Stephen King para llevar “Cementerio de Animales” al cine fue que no se modificase el
contenido original de su novela.
Y, para ir acabando, pues
ya me estoy extendiendo más que las maldiciones de los indios en las historias
de King, os dejo con unos curiosos
datos de la cinta que he ido descubriendo con los años.
-En la cinta, aparecen
dos canciones del grupo “Ramones”.
“Pet Sematary”, compuesta por
Dee Dee Ramone y Daniel Rey
Y “Sheena Is a Punk Rocker”,
compuesta por Joey Ramone
-En un primer momento, George A. Romero iba a ser el encargado
de dirigir esta adaptación, pero por problemas de agenda, el trabajo cayó en
manos de Mary Lambert.
-Stephen King estipuló una cláusula en el contrato que obligaba a
que la localización de la película fuese en Maine, lugar donde creció King
y donde ocurren los sucesos en el libro.
-El actor Brad Greenquist es quien da vida a Victor Pascow, asegura que pasaba muchas
horas maquillado y que en los descansos, ninguno de sus compañeros quería estar
cerca de él, debido al realismo de su maquillaje.
-Uno de los actores para
interpretar a Louis Creed fue Bruce Campbell, protagonista de la saga
“Evil
Dead”, pero debido a la complicada agenda del actor, tuvo que declinar
la oferta.
-Se llegaron a utilizar
hasta siete gatos distintos para interpretar a Church
-En 2019, se desarrolló
un reboot con algunos cambios importantes en la trama, bajo la dirección de Kevin Kolsch y Dennis Widmyer.
Está protagonizado por Jason Clarke como Louis,
Amy
Seimetz como su esposa Raquel
Y John Lithgow como Jud.
-El actor que hizo de Gage (Miko Hughes) sólo tenía dos años cuando rodaron la película.
-Como todos los
escritores, para escribir la novela “Cementerio
de Animales”, King usó uno de
sus mayores miedos nacido a raíz de una terrible experiencia con su hijo
pequeño, pues éste salió corriendo hacia una carretera, (os suena ¿no?) por
suerte, Stephen consiguió agarrarlo
a tiempo. Desde esa experiencia traumática, se obsesionó con el hecho de poder
perder a su hijo.
Mención especial tienen
estas curiosidades de la película, ya que las podemos encontrar a modo de “Easter Eggs”, o “Huevos de Pascua” o lo que es lo mismo, secretos que se esconden en
la trama y que no interfieren en el guion de la misma, pero que ahí están.
Secretos que sólo pueden ver los más curiosos, como los que dejo a continuación
-En el cementerio de
animales, podemos ver una tumba con la siguiente inscripción “Gato Smucky, Smucky fue obediente” Smucky era el gato de la hija de King.
-El vehículo que
atropella al joven Gage, esconde el
número 666, que simboliza el número del demonio.
Y aquí retomamos la
escena anterior en la que Raquel está
llamando por teléfono y donde podemos ver un perturbador cuadro de fondo.
En éste podemos ver a una
niña con un peculiar traje y un gato gris. La protagonista de esta pintura no
es otra que Zelda, la difunta hermana
mayor de Raquel, la cual lleva un
traje muy parecido durante sus escenas.
Y… ¿os suena el traje del
pequeño y maligno Gage?
Exacto, es el mismo traje
del cuadro de su tía, Zelda, sombrero y gato incluidos. La teoría (puesto que no
se explica en ningún momento de la cinta) es que Gage utiliza algo que horroriza tremendamente a Raquel, esto es su el recuerdo de su enferma
hermana Zelda para causar más daño a
la misma.
Y tras este última y
escalofriante curiosidad, me despido no sin antes agradeceros haberme leído y
esperando que os haya gustado este nuevo escrito. Para mí, “Cementerio de Animales” es una de las
películas más crudas de King, y uno
de sus libros más duros (y nauseabundos por lo explícito que suele ser Stephen King) de leer.
Y recordad, nunca
atraveséis el umbral tras el cementerio de animales, allí donde los muertos
andan, más allá del cerco de árboles donde la tierra está maldita…
Hasta el próximo escrito
amigos.